martes, 4 de octubre de 2016

[Debate] Qué compro y por qué

[Debate] Qué compro y por qué



Buenas a todos!

¿Qué tal estáis? Hemos empezado octubre y me he dado cuenta de que el verano ha volado, ¿cómo? ¡Pero si hace nada estaba presentando mi trabajo final! Es increíble cómo pasa el tiempo. En un puff terminan las cosas buenas.

Pero las cosas buenas siempre vuelven: ¡nuevo debate!

Este debate viene a raíz de esta entrada de Kitty Holmes en su blog El Escondite de Kitty.  Si tenéis oportunidad, leedla, resulta muy interesante. A mí por lo menos me hizo pensar sobre ello.





[Debate] Qué compro y por qué


¿Por qué compramos cosas? ¿Qué es lo que hacen que decidamos comprarla? ¿Por qué algunas cosas que nos gustan mucho no las compramos o esperamos mucho para comprarlas? ¿Comprarías algo caro que significa mucho para ti o no lo harías por el precio? (Sentimientos vs Realismo económico) ¿Por qué coleccionamos?
Esas son algunas de las preguntas que me han venido a la mente mientras leía la entrada. Es muy útil hacernos este debate interno para, además, ver lo que nos gusta realmente. También es muy útil como esquema para amigos/ familiares para cuando quieren hacernos un regalo xD
Todas las cosas que compramos tienen un porqué en nosotros: puede que fuese por colección, por gusto, un impulso, un deseo, una recompensa... la satisfacción del algo nuevo (tener algo nuevo, no implicando que lo sea) puede llenarnos durante un periodo largo o uno corto fácilmente identificable por lo que nos hizo motivarnos a gastar dinero en él, bien fuese por el precio o por el sentimiento.


Y es que cuando gastamos en algo, muchas veces surge en nuestra cabeza una vocecilla que nos hace cuestionarnos el porqué y aquí es cuando, si es algo que realmente deseamos y significa mucho, se enfrentan los sentimientos contra el realismo económico, especialmente si lo que queremos comprar se sale de nuestro presupuesto o entra muy justo. ¿Quién gana la batalla?
La duda de si lo compraremos y nos arrepentiremos es bastante probable que nos surja en este momento, a menos que sepamos muy claramente que lo queremos y que haremos lo posible para conseguirlo. A veces lo barato sale caro, se acumula y nos arrepentimos de haberlo obtenido, quizás, por un impulso del precio. Otra veces nos arrepentimos por el precio que hemos pagado y fantaseamos con lo que podríamos haber comprado con esa cantidad.
Creo que el hecho de que la situación económica haya estado y siga mal, nos ha hecho tener más consciencia sobre qué nos llevamos a casa. No sólo por lo gastado, sino que también nos hace darnos cuenta de que el espacio que tenemos es limitado.
Pero al final, es todo una decisión nuestra. Nosotros tomamos la decisión, a pesar de que a veces esté guiado por el hype, y el marketing, pero ése es otro tema. 




¿Qué pensáis vosotros?
Responded a las preguntas si queréis y contad vuestra opinión :D



2 comentarios :

  1. Te ríes si te digo que tu entrada inspirada en una entrada, ha inspirado una entrada para mi blog? xDDD Había algo de lo que quería escribir desde hace tiempo pero no sabía bien como enfocarlo y ahora lo sé, así que gracias!

    Yo compro por varias razones, por utilidad, por gusto, por impulso, por autopremio, por motivación. Y hay cosas que me las pienso mucho y decido no comprar o dejar para luego, generalmente cuando cuestan mucho, cuando cuestan menos es más fácil hacer compra por impulso.

    Aunque lo caro es relativo, eso es un concepto que siempre he tenido clarísimo porque es algo que mi papá siempre ha sabido explicar… lo que es caro en realidad va relacionado a la importancia que tiene para ti ese algo… algo necesario/importante, nunca es caro. Algo que yo he añadido a este concepto es que su tiempo de vida también influye mucho… hey que la billetera me costó $40US, sí suena caro… pero me ha durado 5 años, en serio entonces fue caro? cosas como una laptop, que en mi caso uso para trabajar son cosas que cuestan pero a la larga generan dinero y se pagan solas… creo que eso también es importante.

    Luego vienen las cosas compradas por gusto, por coleccionismo y eso es algo que yo antes no hacía mucho, pero llegó el manga y ahora el mundo del merch me atrapó, así que me encuentro consumiendo estas cosas que “no generan” pero me dan entretenimiento y alegría. No se muy bien como explicarlo? hay satisfacción en tener en físico cosas que te gustan: una historia, unos personajes… es como poner en físico lo que te hicieron sentir o lo que representan… también ahora me mueve muchísimo el hecho de apoyar a los creadores, de hacerles saber que su trabajo gusta, que vale! por eso también trato de consumir no solo de grandes empresas/editoriales/etc si no de creadores independientes.

    Hay muchas cosas en las que todavía lo pienso mucho, pero por lo general en el área del coleccionismo trato de comprar las cosas que se que me gustan y que se que ayudan a quien las crea… sí todo es un negocio, pero yo me sigo sintiendo bien cuando la gente dice que le gustó algo que yo diseñé, y claro que sí, me pagaron por eso… así funcionan las cosas, pero ese sentimiento bonito no tiene valor monetario y es algo que me gusta dar también (aunque a veces me gana la vergüenza y no logro decirlo del todo, al menos puedo consumir más de lo que me gusta y contribuir de esa pequeña forma).

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  2. Buenas :)

    Me alegra que te gustara mi entrada y que te hayas animado a seguir con el tema ^^

    Yo ela verdad es que no puedo decir que haya acabado totalmente con mi faceta de compradora compulsiva, porque sigo comprando más mangas de los que leo ^^U Pero sí que me he vuelto algo más selectiva, que para mí ya es algo, y sé que muchas de las cosas que salen me llaman por el simple hecho de ser novedad, así que intento reducir al mínimo mis compras de primera mano, porque no sería la primera vez que me entra la manía de comprar algo y, al pasar el tiempo, las ganas desaparecen ^^U

    Al menos los libros sí que he dejado de acumularlos, hasta vendí aquellos que me gustaron mucho en su momento pero que sé que, a día de hoy, no releería y si lo hiciera, no sería lo mismo.

    Al final, llego a la triste conclusión de que a veces soy más feliz fantaseando con comprar cosas que comprándolas ^^U


    Un beso

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